La cadena HBO acaba de anunciar su renovación para una tercera temporada.
Para los que no la conozcan, Evan Rachel Wood, Thandie Newton, Ed Harris, Jimmi Simpson, Jeffrey Wright, James Marsden y Tessa Thompson son los protagonistas de la serie de HBO, cuya primera temporada consiguió nada menos que 22 nominaciones a los Premios Emmy, ganando cinco de ellos. La primera temporada de este proyecto de Jonathan Nolan y Lisa Joy congregó a 13,2 millones de espectadores de media en todas las plataformas disponibles. La serie se basa en la cinta homónima de 1973 escrita y dirigida por el célebre autor de ciencia ficción Michael Crichton, que falleció en 2008.
Los showrunners Jonathan Nolan y Lisa Joy anticiparon hace unos meses que la temporada 2 de Westworld iba a tratar sobre la fuente de energía y construcción de los anfitriones, que, en los nuevos capítulos, “estarán más cerca de lo biológico que lo mecánico”. También agregaron que la temporada explorará más sobre los “aspectos básicos de lo que son”, ya que los anfitriones están tratando de entenderse a sí mismos.
Westworld es una serie en la que la música ha sido un elemento esencial gracias a la BSO de Ramin Djawadi, tanto en sus composiciones origina como en reinvención de diversos clásicos modernos en un estilo, la mayor parte de las veces tocados en una pianola. Durante la primera temporada, pudimos escuchar versiones diferentes de canciones familiares como Black Hole Sun, de Soundgarden, Paint It Black, de los Rolling Stones, Back To Black, de Amy Winehouse, además de algunas selecciones del catálogo de Radiohead, que continuarán en ésta con revisiones como Runaway, de Kanye West o Heart-Shaped Box, de Nirvana.
Para Variety “la buena noticia es que se han corregido y mejorado modestamente varios errores técnicos y problemas estructurales en Westworld 2.0. El sistema operativo es más suave, pero el reclamo más insistente del drama -o la aspiración- es que ha alcanzado la plena conciencia, o al menos un mínimo de originalidad deslumbrante”. Newsday también celebra la reducción de elucubraciones filosóficas en la serie:“Por suerte para los fans que no quieren trabajar tanto, y menos para aquellos que lo hacen, la segunda temporada es mucho más digerible. Todavía es inteligente mientras logra empujar la nueva narrativa hacia delante con fuerza y rapidez. También se las arregla para salpicar los cerebros también: Westworld ahora es menos una acusación mordaz de la violencia en la pantalla (la primera temporada) y más una serie completamente snuff”. Washington Post valora que “en lugar de reflejar la avalancha tremebunda y competitiva que resulta en todas estas series meditadas a medias, a medio terminar, bastante caras y ciertamente mediocres, Westworld demuestra la manera adecuada de gastar mucho tiempo y dinero de una manera meticulosa”. Para Los Angeles Daily News “[Westworld] regresa de manera impresionante. … La serie generalmente da en el blanco con una narración fuerte que te da mucho en qué pensar después de que termine el tiroteo. Y las actuaciones son excepcionales. Este año, las mujeres están liderando el camino”.
