Abierta en Madrid la muestra La Movida, juventud y libertad. 1977-1986

La Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) ha inaugurado en la sede madrileña de la institución (Palacio de Longoria) la exposición La Movida, juventud y libertad. 1977-1986 que celebra el estallido de libertad y creatividad que supuso la irrupción de este movimiento que se propagó por todos los ramales del arte y la cultura (música, cine, teatro, diseño…) desde los primeros años de la Transición hasta mediados de los 80.
La muestra está comisariada por el compositor, guitarrista y escritor Sabino Méndez, que ha destacado la importancia de la Movida: «En las últimas cinco décadas no ha aparecido una tendencia que haya abarcado e influenciado tantos campos diferentes. Significó deseo y libertad, dos palabras que cualquier sintagma que las contenga será sano, vital y prometedor. Dimos visibilidad a la homosexualidad, sobre la que hasta la fecha había un tabú y también conseguimos llenar de colorido un país que hasta entonces había sido de grises y sombras».
La presentación de la exposición ha reunido a muchos de los protagonistas de este movimiento sociocultural que tanto ha influido en nuestro país. Entre ellos, los compositores y músicos Ana Curra, Nacho García Vega, Coque Malla, Luis Martín, Ricardo Moreno y Luis García López (Los Ronaldos), Alejo Stivel, Álvaro Urquijo, Carlos Vega, Basilio Martí, El Gran Wyoming, y Javier Portugués (Modestia Aparte, Joaquín Rodríguez (Los Nikis), Alberto García Alix, o Víctor Coyote, responsable de la imagen de la exposición.
La Movida tuvo su principal eco en la rupturista escena musical del momento, conocida también como nueva ola, representada en la exposición por alrededor de una treintena de formaciones de pop y rock. Con la guitarra como elemento sustancial de todas estas bandas, se mostrarán modelos míticos y con mucha historia; es el caso de la Squire Telecaster Custom con la que Teo Cardalda compuso muchas de las canciones de Golpes Bajos, una Rickenbacker 325 C64 JG cedida por Sabino Méndez, la Hofner de doce cuerdas que Álvaro Urquijo utilizó durante la grabación del primer álbum de Los Secretos o la Gibson ES 335 que Antonio Vega lució en la fotografía de portada de su debut en solitario, No me iré mañana.
También icónicas son muchas de las piezas de ropa y complementos exhibidos. Por ejemplo, un abrigo de Alaska diseñado por uno de sus estilistas de cabecera, Antonio Alvarado, referente de La Movida que en 2021 fue reconocido con el Premio Nacional de Diseño de Moda. De las perchas de la exhibición colgarán igualmente el primer mono negro y las gafas protectoras que vistieron los componentes de Aviador Dro en directo, la camisa con la que Edi Clavo posó en la portada del primer álbum de Gabinete Caligari (Que Dios reparta suerte), la peluca que Ana Curra uso para la sesión fotográfica de El acto de Parálisis Permanente o algunos de los llamativos trajes que solía enfundarse Tino Casal, además de un surtido de cazadoras de piel utilizadas por artistas como Nacho Cano (Mecano), Jorge Martínez (Ilegales) o Antonio Vega.
Emblemáticos, también, en la iconografía propia de la música, son los carteles promocionales de conciertos, que, con el paso de los años, han derivado en auténticas piezas de arte y objetos de coleccionista. De esta etapa de la escena española, la muestra contará con pósters de actuaciones de Almódovar & McNamara, Golpes Bajos, Nacha Pop, Parálisis Permanente o Los Ronaldos, o de aquel ¡Gran Guateque! que en 1978 reunió en el Centro Cultural Juvenil del madrileño barrio de Prosperidad, donde algunos sitúan el germen de La Movida, a tres de “los grupos del momento”: Mermelada de Lentejas, Zombies y Kaka de Luxe, grupo y colectivo artístico que realizó el diseño del cartel junto al pintor e ilustrador Ceesepe.
Otros ámbitos de La Movida
Aunque la música estuvo siempre bajo el foco principal de La Movida, el movimiento abarcó igualmente con desmedido descaro e ingenio otros ámbitos de la cultura, como el del cine y la fotografía, la literatura y el cómic, o incluso los medios de comunicación, con numerosos fanzines y revistas (La Luna de Madrid, Madriz…), programas de radio o televisión (como La edad de oro, Musical Express y Popgrama), que en la época dieron cancha a los artífices de esta escena y que hoy son parte de la historia y memoria sentimental de varias generaciones de españoles.
Por lo que se refiere al audiovisual, se exhibirán carteles originales de Matador, de Pedro Almódovar o la célebre cámara de Super 8 que el cineasta manchego adquirió a su llegada a Madrid, mientras trabajaba en Telefónica, y con la que realizó sus primeras incursiones como director, con cortometrajes mudos como Film político o La caída de Sodoma. También el póster promocional de ¡¡¡A tope!!!, película de Ramón Fernández que incluyó actuaciones de grupos como Alaska y Dinarama o Loquillo y los Trogloditas, o una pieza gráfica original realizada para el cartel de ¿Qué hace una chica como tú en un sitio como éste?, de Fernando Colomo.
Otras curiosidades que los asistentes podrán contemplar en la exposición sobre La Movida son, por ejemplo, el Disco de Oro que Los Ronaldos recibieron por las ventas de su primer disco, el colorido taburete Dúplex diseñado por Javier Mariscal y que se exhibe también en el Museo de Arte de Filadelfia o en el alemán Vitra Design, la cámara y el fotómetro que el fotógrafo Domingo J. Casas (cuyo trabajo ilustra centenares de portadas de discos) manejaba en los años 80, la bola de cristal y dos de los electroduendes (Maese Cámara y Maese Sonoro) del programa La bola de cristal y el muñeco del popular Horacio Pinchadiscos del magacín infantil Sabadabadá, presentado por Mayra Gómez Kemp.
En suma, con La Movida, juventud y libertad. 1977-1986, SGAE, como la Casa de las Autoras y Autores que es, desea rendir más que merecido tributo a quienes hicieron posible este movimiento, tanto los que alcanzaron la fama como los que no, a todos los que, de algún modo, dejaron su particular huella en un momento excepcional, caracterizado por su fugacidad y juventud, que sin duda merece ser inmortalizado.
Ciclo de cine español de La Movida
En paralelo a la exposición La Movida, juventud y libertad. 1977-1986, la Fundación SGAE ofrecerá del 3 al 7 de junio en sesión doble (19h y 21h), en la madrileña Sala Berlanga (C. Andrés Mellado, 53. Entradas: 3,50 euros. A la venta en taquilla y en entradas.com +g.g.) una muestra de largometrajes representativos de aquella explosión cultural. Un programa que lo mismo comprende underground castizo (Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón, de Pedro Almodóvar), como comedias dramáticas (Tigres de papel, de Fernando Colomo), testimonios de la agitación musical de la época (Nos va la marcha, de Manu Bersategui, Raimundo García y Manuel Gómez Pereira), películas colectivas sobre los tabúes de la sociedad (Cuentos eróticos, de Enrique Brasó, Jaime Chávarri, Emma Cohen, Fernando Colomo, Jesús García de Dueñas, Augusto M. Torres, Josefina Molina, Juan Tébar y Alfonso Ungría) o una de las obras experimentales más audaces del cine español (Arrebato, de Iván Zulueta). Un fascinante recorrido por varias de las corrientes fílmicas que La Movida generó en aquellos días.
La exposición está abierta al público del 4 de junio al 20 de julio, de 16.00 a 21.00 horas, de lunes a domingo, con entrada libre.
