La primera parte del regreso de una de las sagas más populares del cine se estrenará esta semana.
La primera entrega de The Hobbit se centra en la misión que el mago Gandalf y una delegación de trece enanos encargan a Bilbo para recuperar el reino de Erebor, que está bajo el poder del dragón Smaug. Esta precuela es además la primera película -causa también de polémica- rodada a 48 F/S (frames per second), es decir a 48 fotogramas por segundo lo que supone el doble de la velocidad de filmación estándar.
El resto de los filmes de la trilogía The Hobbit: The Desolation of Smaug (la desolación de Smaug) y The Hobbit: There and Back Again (Allá y otra vez de regreso) está previsto que puedan ser estrenados en diciembre de 2013 y julio de 2014, respectivamente.
El éxito de público está bastante asegurado pero…¿la crítica apoyará esta nueva trilogía como lo hizo con la primera? Lo que está claro es que la unanimidad es bastante al declarar que no se puede comparar a la primera trilogía, de tal forma para la gran parte de la crítica The Hobbit no pasa de un aprobado: “Si usted está dispuesto a verla, sepa que An Unexpected Journey es un paseo competente, pero en su conjunto carece de propósito, dando la impresión de una serie de de televisión en sus últimas temporadas, todavía resoplando y con el pleno conocimiento de que ha tocado techo. No hace falta decir, que los fans encontrarán mucho con lo que disfrutar, otros podrán tener la sensación de ser invadidos por un deja vu…” destaca Indiewire. Para Variety “Jackson y su equipo parecen estar obligados a profundizar en el mundo de su anterior trilogía anterior con escenas que sería mejor haber dejado a una prolongada edición en DVD (u omitirlas por completo) pero deja ausente una razón de peso para que los aficionados quieran volver a ver la segunda parte…”. Para Time, seguramente en comparación con la anterior trilogía “la película carece de majestuosidad. En su mayor parte, es a menudo demasiado grandilocuente, y el tiempo de ejecución es indefendible…” Slant Magazine es más optimista: “La película tan solo es una limpieza de garganta, el indicio de un manantial de riquezas emocionales por venir…”.
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