La película de la semana: Parpadea dos veces
Se estrena el debut cinematográfico como directora de la actriz Zoë Kravitz.
Las películas encuadradas dentro de las vacaciones de verano son una constante habitual en todos los géneros, y mucho más si se aprovecha su estreno durante los meses de la estación, al igual que ocurre en las “películas navideñas” y alcanza una adaptabilidad excelente para todos los géneros, tanto para películas infantiles de campamentos de verano o dramas coming-of-age – Stand by me, 1986, Adventureland, 2009 o Moonrise Kingdom, 2012- como dramas o comedias románticas – Adventureland, 2009, Call Me by Your Name, 2017- sin desdeñar el terror para adultos con palomitas- Viernes 13, 1980 o I Know What You Did Last Summer, 1997- pero también musicales – Dirty Dancing, 1987, Mamma Mia, 2008-en los inevitables largos viajes por carretera o tren –Dos en la carretera, 1967, Thelma y Louise, 1991, Before Sunrise 1995 – en las comedias – Resacón en Las Vegas, 2009, Palm Springs, 2020– dramas como la recinte Aftersun, 2022 o por supuesto, pasatiempos criminales como Muerte en el Nilo, 1978. Y en cuanto a localizaciones, Venecia es el lugar perfecto para ambientar tanto películas románticas como Summertime de 1955 con Katharine Hepburn como thrillers (The Talented Mr. Ripley de 1999) pero si prefieres la Costa Azul tienes la citada Two for the Road o La piscina de 1968 con el recientemente fallecido Alain Delon con su revisión en A Bigger Splash de 2016, dirigida por Luca Guadagnino o Roma (Vacaciones en Roma, 1953) con Audrey Hepburn. Otra forma de viajar pero con el aire acondicionado en casa…
En el caso de Blink Twice, escrita por Kravitz y E.T. Feigenbaum, la cinta filmada íntegramente en Yucatán, México, está protagonizada por Naomi Ackie como Frida, una camarera de cócteles cansada de que la pasen por alto y que es invitada a la isla privada del magnate multimillonario de la tecnología Slater King (Channing Tatum) para lo que parece una lujosa fiesta sin fin. La película también está protagonizada por Simon Rex, Christian Slater, Geena Davis, Haley Joel Osment y Kyle MacLachlan. En una entrevista de 2022 para la edición de Moda femenina de otoño de la revista WSJ, Kravitz compartió que la historia de la película “nació de mucho enojo y frustración en torno a la falta de conversación sobre el trato a las mujeres, específicamente en industrias que tienen mucho dinero en juego, como Hollywood, el mundo de la tecnología, todo eso”. Kravitz tuvo que cambiar con pesar su título original- Pussy Island– debido al rechazo que supuso para algunas salas de cines como marcas publicitarias, algo que habría podido poner en peligro su estreno. “El título surgió de ese mundo. El título es la semilla de la historia”, explicó sobre su nombre original. “Representa esta época en la que sería aceptable que un grupo de hombres llamara así a un lugar, y la ilusión de que ya hemos dejado atrás esa época”. Kravitz habló sobre su experiencia escribiendo la película y por qué decidió que finalmente tenía que dirigir el proyecto. “Trabajé en el guion durante tanto tiempo: comencé a escribir en 2017 y filmamos la película en 2021″. Además destacó como referentes a los directores con los que ha trabajado Steven Soderbergh (Kimi), Matt Reeves (The Batman). Jean-Marc Vallée (Big Little Lies) o George Miller (Mad Max: Fury Road).
Para Variety “[Kravitz] compone la película a partir de primeros planos vibrantes, y utiliza cada toma (un cóctel, una mirada, un corte de las redes sociales) para contar una historia, llevándonos al centro de un encuentro, de modo que lo miremos y lo experimentemos al mismo tiempo. Su técnica es fascinante; es el trabajo de una cineasta nata”. Según Chicago Sun- Times “es una mezcla radical de sátira social psicodélica y desconcertante y horror salpicado de sangre, en la que Kravitz da un gran paso en su debut como directora de largometrajes y conecta con un impacto estremecedor. Es una película que da un gran salto tras otro y aterriza con éxito la mayoría de las veces”. Para Empire es “un thriller muy efectivo e incisivo que establece a Zoë Kravitz como una directora talentosa y te muestra un lado de Channing Tatum que nunca antes habías visto”. Según Time Out “Kravitz se mueve con destreza entre la tensión, el terror, la comedia negra y la sátira social, a veces ofreciendo las cuatro cosas simultáneamente. Es una película sobre los abusos de poder, los peligros de ser mujer en un mundo de hombres y la importancia de la solidaridad femenina, pero nunca es didáctica, simplemente cautivadora”. Sin embargo para Washington Post “En resumen, la película es una pasable pérdida de tiempo, pero podría ser mejor (para el futuro cinematográfico de Kravitz y para nosotros) si simplemente nos olvidáramos de todo el asunto”.