Película basada en la vida del boxeador finlandés, primer largometraje de Juho Kuosmanen y premio Un Certain Regard en Cannes.
“Nos aseguraremos de que, cuando todo esto haya terminado, se pueda decir que el 17 de agosto de 1962 es el día más feliz de tu vida”, dice el ambicioso entrenador de Mäki Elis Ask (Eero Milonoff) ese verano, tratando de animar al contendiente, Olli es un panadero de la zona rural de Finlandia, que debe enfrentarse al vigente campeón del mundo, el estadounidense Davey Moore.
Ésta es tan sólo la introducción de una película que introduce nuevos matices al subgénero del boxeo, uno de los más visitados en Hollywood desde sus años dorados –El ídolo de barro de 1949, Marcado por el odio de 1956 o Más dura será la caída de 1950- , y que, pese a tener en su caudal clásicos como Toro Salvaje (1980) o Rocky (1976), no deja de aportar excelentes películas en tiempos recientes, como Million Dollar Baby (2004) o The Fighter (2010). Juho Kuosmanen apuesta por los moldes de cine clásico con la filmación de blanco y negro en un 16mm monocromo, una ambientación de la que es responsable su director de fotografía Jani-Petteri Passi. Pese a ser una de las favoritas, la cinta propuesta por Finlandia no fue seleccionada entre las favoritas a optar al Oscar a Mejor Película Extranjera.
Así, para The Hollywood Reporter la cinta “esquiva de tal forma el molde prototípico de lucha, perseverencia y de la simple historia de victoria o derrota, que podría casi ser considerada un retrato antibélico (…) La pelicula es una pequeña maravilla de impecable destreza”. Aunque para The Film Stage “El día más feliz en la vida de Olli Mäki no sucumbe a los temas obvios del biopic, pero sí sufre en sentido contrario: a veces carece de ese propósito singular que empuja hacia adelante tantas otras películas deportivas”. Screen Daily aplaude, por último, la original determinación del cineasta, que “intentando crear un documental sobre la ascensión de Mäki a la cima, aporta un enfoque que no resulta muy cómodo o capaz de ajustarse fácilmente al arquetipo requerido”.
