The Antlers – Burst apart

El debut de The Antlers quedó grabado en nuestra memoria como uno de los trabajos destacados de 2009. Pese a la ambientación sórdida que emanaba del disco, aun bajo la deprimente trama que el trío de Brooklyn dibujaban en Hospice, el álbum fue escogido como favorito por gran parte de los medios musicales. Con esa premisa, la grabación de su continuación seguramente debía provocar cierto vértigo en la banda y, por otro lado, generaba grandes expectativas a sus seguidores.

Lo cierto es que el grupo no ha pretendido hacer un Hospice II, hecho que es de agradecer. Aquella dolorosa experiencia personal deja espacio en Burst apart a un disco mucho más abierto, donde da más juego la gran voz del cantante Peter Silberman, que mantiene al mismo tiempo su carácter sombrío. Con Radiohead -cómo no- en el punto de mira, y ciertos guiños a Bono -¿quién no lo ha pensado al escuchar I don’t wanna love?-, Silberman impregna el álbum, con todo, de un sello personal (Corsicana, Rolled together) que evita que las comparaciones pasen de ser un aliciente a un inconveniente. En ese sentido, sus incondicionales difícilmente pueden sentirse decepcionados. Con letras que no han perdido el tono abatido y catártico de su predecesor, el brillante single Every night my teeth are falling out o No windows sobresalen en un disco que, finalmente, deja la sensación de que lo mejor de The Antlers está aún por llegar.