Después de seis décadas en el escenario, Serrat decía ayer adiós en el Palau Sant Jordi de Barcelona.
Serrat contó con David Palau a la guitarra, Úrsula Amargós a la viola, Vicente Climent a la batería, Rai Ferrer al bajo, José Miguel Pérez Sagaste al saxo y clarinete, Josep Mas, Kitflus a los teclados y la electrónica, “y al mando de la nave, Ricard Miralles”. Es el compositor, director musical y arreglista fundamental de la trayectoria de Serrat, a quien ha acompañado en la grabación de los discos y en los directos de las diferentes giras que ha realizado desde que le conoció en 1968.
“Gracias por venir hoy, el día que solemnemente proclamo mi despedida por voluntad propia“. En la despedida de su gira “El vicio de cantar 1965-2022” ante 15.000 personas Serrat repasó su carrera sin orden cronológico, comenzando por Temps era Temps de su álbum de 1980 Tal com raja, los comienzos en catalán con Cançó de bressol del debut Ara que tinc vint anys, Pare de Per al meu amic o el sucesor del primero Fa vint anys que tinc vint anys de 1984 con Seria fantàstic. No faltaron otros clásicos como No hago otra cosa que pensar en ti, Nanas de la cebolla, Para la libertad, Hoy puede ser un gran día, Mediterráneo o Paraules d’amor. No fue casualidad que escogiera como cierre, ya en solitario, Una guitarra, una de las canciones que se lanzaron en su primera grabación de 1965, el EP del mismo título.
La extensa discografía de Joan Manuel Serrat consta de 32 álbumes de estudio, seis álbumes en directo y trece álbumes recopilatorios, publicados y distribuidos por el sello discográfico Zafiro, con quien el cantautor fichó en 1969. Ara que tinc vint anys fue su primer éxito (#17, 1967), seguido de Canço de matinada (#8, 1967). A partir de ahí fue habitual de las listas como con Poema de amor/El titiritero (#10, 1968) y el más que conocido La, la, la (#4, 1968) que compartía sitio con la eurovisiva versión de Massiel. En 1969 Serrat estuvo prácticamente todo el año en el candelero, bien con sus canciones en castellano (Manuel, #6 , 1969) como en catalán (Per Sant Joan, #11, 1969), seguido del más que conocido Tu nombre me sabe a yerba (#5, 1969), La paloma (#10, 1969), el álbum Dedicado a Antonio Machado (#7, 1969) y Penélope (#11, 1970). Serrat fue el artista más vendedor de aquel año 1969, por encima de los Stones o el mismo Elvis.
El reconocimiento del público continuaría a lo largo de los 70s y 80s: Como un gorrión (#2, 1970), Fiesta (#5, 1971), ¿Que va a ser de ti?/Lucía (#11, 1972), Cancion infantil/Campesina (#26, 1974), Edurne (#10, 1975), Cada loco con su tema (#10, 1983) o No hago otra cosa que pensar en ti (#22, 1983). Eso sin olvidar canciones tanto o más que reconocibles de su discografía que no fueron singles pero sí estuvieron en discos de éxito: Señora, Mediterráneo, Para la libertad, Esos locos bajitos o Hoy puede ser un gran día.
La exitosa carrera de Serrat no se quedó ni mucho menos estancada en los 80s: en 1985 fue nº1 dos veces, una con el álbum Serrat en Directo y la otra con El Sur también Existe, y desde entonces ha regresado al primer lugar de las listas, batiendo todos los récords de un artista en castellano, con Bienaventurados (1987), Utopía (1992), Sombras de la china (1998), Versos en la Boca (2002), Hijo de la luz y de la sombra (2010) o más recientemente La Orquesta del Titanic, su disco con Sabina de 2012.
